viernes, 23 de mayo de 2014

HUMOR: LAS VOLADAS DE MAMA MARIA. 07

LAS VOLADAS DE MAMA MARIA. 07.
Vivencias basadas en la esencia de nuestras raices y en las costumbres del campesinado, desde el respeto y con una chispa de humor.







Se llegó Papa Vicente ("Cho Vicente"), el marido de Mamá María al Ayuntamiento para empadronarse.
El fuccionario le preguntó: ¿sabe usted leer y escribir?
-No señor, soy "alfabeto". Mi padre cuado era lechoncito me mandó con las cabras pal monte y no a la escuela.
-Bueno, vamos a ver, ¿cuál es el número de su casa?
-Pos lo inoro, señor.
-Mire don Vicente, ahora usted se va para su casa y me trae el número en un papel.
Cho Vicente se llegó a la casa y arrancando el número de la pared, lo envolvió en un papel y se llego de nuevo pal Ayuntamiento.





jueves, 22 de mayo de 2014

HUMOR: LAS VOLADAS DE MAMA MARIA. 06

LAS VOLADAS DE MAMA MARIA. 06.
Vivencias basadas en la esencia de nuestras raices y en las costumbres del campesinado, desde el respeto y con una chispa de humor.

-¡Güenas, Seña Maria!, ¿tiene usted mala cara o son figuraciones mias?
-Lo que pasa es que tengo el estogamo como un vulcan jirviendo. Todo me sienta mal.
-A lo mejor tiene usted una ursula en la boca del estogamo.
-Pues lo inoro. Ayer domingo mesmo comí un escladon con carne cochino y luego me eché un fisco en el catre y pegaron las voladuras y atras una regolución que ehé hasta las vigilias.
-Pos, si va pal medico, le meten una manguera por la boca pa golifiar lo que tiene en el estogamo.
¡Que esta usted diciendo cristiano!. Primero difunta antes que me metan esa manguera.

miércoles, 21 de mayo de 2014

HUMOR: LAS VOLADAS DE DOÑA MARIA. 05

LAS VOLADAS DE DOÑA MARIA. 05
Vivencias basadas en la esencia de nuestras raices y en las costumbres del campesinado, desde el respeto y con una chispa de humor.

Diba Cho Vicente el marido de Seña María por la vereda que va pal monte cuando se cruzó con Benito el de Flora.
-¡Benito, dichosos los ojos que te ven!. Ya jacía un par de años que no aparecias por aquí.
-Pos si señor, es que me fuí pa la isla de enfrente a trabajar.
-Y qué ¿te casaste o sigues soltero?.
-Pues jace un año que me casé con una "muda".
-¡Ño...! Pos si que tuviste suerte, pues yo me casé con lo puesto.
-Y usted ¿cómo le va, Cho Vicente?.
-Güeno, pos no me puedo quejar, aunque esta mañana tuve un tropiezo.
-¿Fué grave...?
-Grave no, jodido. Pos resulta que diba a coger las papas coloradas. Cuando de regreso pa la casa con un saco al hombro, me salió al paso un endividuo con un cuchillo en la mano y me dijo:
-¡Dame ese saco de papas o te rajo y también las "pelas"!.
-¡Ño...! ¡Pelalas tu que tienes el cuchillo!. Respondí.
-¿Y usted que jizo. Darle el saco y echarse a juyir?.
_¡No...! Le mande con el saco por todo el jocico al tunante.